LAVIDAMEPROVOCA VII

         Volviendo a casa por la Gral Paz destino bajada Beiró. La espalda enroscada sobre si misma por la posición del asiento, haciendo presión sobre la médula, cocinandome a la plancha dentro de mi "auto" (si, soy muy comillero y soy un perdedor, si no me viste haciendo striptease en Pinar de Rocha, es por algo). Mantengo la distancia más prudencial posible con respecto a los otros vehículos hasta que una ráfaga color azul noche me pasa por izquierda a 250 km por hora y del sacudón casi me hace chocar con el Citroên 3CV que tenía al lado. Le pasé tan cerca que pude ver que tenía un calco que citaba "El hecho de que toques bocina no hace que esta porquería vaya más rápido". Luego de salir del shock, pude ver que un Audi A8 con patente de hace 2 horas voló por el carril rápido levantando el pavimento y sin poner luz de giro, cruzó 4 carriles en línea casi perpendicular para tomar la salida más cercana. Luego de una seguidilla de bocinazos y obscenidades múltiples, el tránsito retomó su cauce normal.
          Sucede que momentos más tarde escucho que desde atrás mío surgía un nuevo oleaje de bocinazos. Pensé: 'Será que otra vez se me desprendió el paragolpe causando una serie de eventos bochornosos y desafortunados desembocando en la muerte de un caniche toy?' (no quiero hablar del tema). No, de entre dos auto surgió una motoneta que llevaba una familia entera: el padre, la madre, el nene, la nena, un bebé, una jaula con una cotorra, una bandeja de canelones, la chancha, los veinte y la máquina de hacer chorizos. Dió dos vueltas alrededor de mi auto, se pasó al carril izquierdo, saltó el guardarail (si no se escribe así, avisenme, que voy a wikipedia y lo cambio), anduvo haciendo equilibrio y malabares con los pibes y se fué en contramano hasta Pichincha. Nueva serie de bocinazos e incluso gestos entre conductores, de esos que nunca entendiste pero los aprendiste de otros manejando (se dice que los inventó Henry Ford, conocidos como los diez mandamientos de la producción en serie).
           Una vez que ha vuelto la calma a mi corazón y el mismo volvió a su posición normal, como siempre, es el momento de reflexionar. Quisiera comprender, Madre Destino, cómo carajo es que este animal cruza cuatro carriles sin sufrir un rasguño? Cómo es que un tipo en una moto con cinco personas no pierde el equilibrio ni destruye a su familia, incluyendo su motonga? Pero lo más importante... Por qué es que a pesar de que pongo luz de giro hasta para entrar al baño, que cedo el paso cuando corresponde y que no tengo una sóla multa por exceso de velocidad, tengo el auto hecho un pañuelo facial gripiento?! (gracias Bob Patiño por el comentario).
          Madre Destino, realmente sos muy mala para barajar la suerte... Hablando de suerte, ya me fuí hasta aeroparque de tanto reflexionar otra vez y me estoy quedando sin nafta... Pasa que el sonido del caño de escape suelto es casi hipnotizante...
         
P.D: Disculpe señor, no sabe cómo hago para retomar Gral. Paz? Ah perdón, era señora... No, no se ofenda... Uy, tiene amigos... PERDÓN, AMIGAS!... Hola si, amor? Voy a llegar tarde a casa...